ARP pretende ser un sindicato que coja el testigo de aquellos sindicalistas que a principios de la democracia lucharon y se comprometieron para conseguir una policía civil y democrática al servicio de la ciudadanía, algunos de ellos pagando un alto precio personal.

El sindicato actuará y defenderá los derechos y libertades de sus afiliados ante la Administración, los tribunales y demás organismos pertinentes, siempre alejada del concepto corporativista de las instituciones y centros donde desarrollan su labor profesional.

Nos centramos en el ámbito de la Policía Nacional pero sin que se convierta en una barrera, abarcando también a otros cuerpos y administraciones.

Entre nuestras reivindicaciones principales está la unificación de la Policía Nacional y la Guardia Civil en un solo cuerpo policial civil estatal, con independencia de la esfera religiosa, con plenos derechos como funcionarios del Estado, junto a las policías autonómicas y locales, representados en la Mesa de la Función Pública, con derecho a la libertad sindical plena (posibilidad de afiliación a sindicatos de los trabajadores, funcionarios, no exclusivamente policiales), a la negociación colectiva y a la huelga concertada. Abolir el Consejo de la Policía y sustituirlo por un órgano central de negociación viculante. Suprimir las Unidades Adscritas del CNP a las CC.A.A. Eliminar las medallas y felicitaciones públicas. Establecer un sistema objetivo, justo y transparente de acceso al Cuerpo, de promoción interna, de adscripción y cambio de unidades y destinos, basados en el mérito, capacidad, igualdad, escalafón y transparencia.

ARP es una organización totalmente independiente de partidos políticos pero que entiende la necesidad de la existencia de contactos con ellos, sea cual sea su ideología sin distinciones partidistas, para la consecución de mejoras para los policías.